· 

Encontré el sentido de la vida

Sermón cristiano | Encontré el sentido de la vida

Temprano en la mañana, me senté en mi pequeño escritorio junto a la ventana, mirando en silencio el video de danza y la canción “La felicidad en la buena tierra de canaán”. Mi corazón se elevó con la melodía y sonreí inconscientemente. Realmente sentí la paz y la seguridad de acudir ante Dios.

Caigo en el pecado y vivo en el vacío y el dolor

Vine a Corea del Sur hace unos años para ganar más dinero. Después de un período de trabajo arduamente, poco a poco empecé a llevar una vida más próspera, pero en mi corazón a menudo me sentía aburrido y vacío. Mis amigos me invitaban a menudo a comer y beber alcohol, y a ir a bares de karaoke y similares para cantar y bailar. A menudo, llegábamos a casa tarde en la noche. En aquella época, los dichos populares entre nosotros eran “Aprovecha el día par obtener placer, porque la vida es corta”, “Emborráchate hoy y preocúpate de las cosas mañana”, y “Aprovecha el hecho de ser joven para comer, beber, estar contento y disfrutar de la vida, ya que cuando seamos mayores, no podremos disfrutar de nada”. Estas palabras llamaron mi atención y pensé que era así como debíamos vivir nuestras vidas. Después, cada vez que mis amigos se reunían y salían, siempre me pedían que fuera con ellos. Sucedió que no tenía nada que hacer después del trabajo y de todos modos me aburría, así que siempre iba con ellos. Cuando íbamos a algún lugar a comer, comíamos y bebíamos como un grupo de hermanos, hablando y riendo, y sintiéndonos muy felices. Después de comer y beber, íbamos a bares de karaoke y otros lugares para cantar y bailar. Después de nuestro festín y jolgorio, sentía que estar con un grupo tan grande de amigos, hablar, reír, estar con ellos y divertirme tanto, era realmente genial. A veces, ellos no querían salir, pero yo sí. En ese tipo de situaciones, el cansancio que sentía en el trabajo, todas mis frustraciones en la vida y todo lo que no me hacía feliz desaparecía en un instante. Poco a poco, llegué a creer que era una estupidez no comer, beber y ser feliz en la vida, y que este tipo de vida era el único que traía alegría y que me elevaba por encima de la monotonía. Después del trabajo, bebía sin inhibiciones casi todos los días, pero posteriormente, en mi tiempo libre, mi corazón aún se sentía vacío y desolado. No pude dejar preguntarme: ¿Por qué vive la gente? ¿Cómo puedo llenar el vacío en mi espíritu?

Aunque sentía todo tipo de emociones, la vida y el trabajo tenían que continuar. Debido a que mis compañeros de trabajo y yo teníamos que dejar de trabajar cada vez que llovía, todo el mundo iba a una sala de mahjong en su tiempo libre para distraerse jugando al mahjong. Me pidieron que fuera también, y pensé: “Iré a jugar un rato. De todos modos tenemos tiempo libre. Jugaré mahjong para pasar el tiempo y mantenerme ocupado en estos días aburridos”. Y así, pasaba todo el día en la mesa de mahjong, siempre perdiendo mucho y sin ganar gran cosa. A veces, perdía entre dos y tres millones de won coreanos al día. Mientras jugaba, me sentía muy feliz y me divertía al máximo. Pero después de regresar a casa, las cosas seguían igual, y me sentía muy mal por el dinero que había perdido. Me decía a mí mismo que no jugara más al mahjong, pero al día siguiente, y tal como estaba previsto, volvía a la sala de mahjong. Terminé perdiendo más y más, e incluso les debí dinero a mis amigos. Me odiaba a mí mismo por no poder ejercer ningún tipo de autocontrol. Al principio, mi intención era jugar solo para superar los tiempos aburridos, y jugar un poco de mahjong para divertirme. Nunca imaginé que terminaría añadiendo tanto dolor a mi vacío. Más tarde, el proyecto de trabajo llegó a su fin y me las arreglé para pagar todo el dinero que debía, así que me mudé a otro sitio de trabajo.

Después de llegar allí, seguí reuniéndome con mis amigos y saliendo a comer, beber y divertirme con el dinero que ganaba. Todo lo que me produjo fue felicidad temporal, y mi vida aún estaba muy vacía, tanto así que me sentí como si estuviera viviendo en un mundo falso. Todos eran amigos en la superficie –comíamos, bebíamos, nos divertíamos juntos y disfrutábamos de la vida–, pero en realidad todos solo se preocupaban por sí mismos. Especialmente cuando un asunto afectaba a sus intereses personales, se atacaban y se juzgaban unos a otros a sus espaldas. En mi tiempo libre, a menudo pensaba: “¿Voy a vivir mi vida así? Un sinnúmero de personas a mi alrededor está siguiendo los pasos de los demás. ¿Podría ser que no haya otra forma de vivir que esta?”

¿Cuál es la causa principal del vacío en la vida humana?

Un día en el trabajo, conocí a Enhao. Nos conocimos y nos contamos todo, y nos hicimos amigos íntimos. Una vez, en una conversación, le manifesté toda la depresión que sentía en mi corazón. Me dijo: “Voy a llevarte a un lugar, y todos tus problemas se resolverán”. Así fue como terminé yendo con él a la iglesia. Les conté a los hermanos y hermanas mis experiencias y tomé la iniciativa de hacer las preguntas: “¿Por qué la vida humana es tan vacía? ¿Cómo podemos librarnos del vacío y del dolor de la vida?”

Una hermana me dijo: “Hermano, estas preguntas que has hecho dejan perpleja a mucha gente. El nivel de vida de la gente está mejorando, y cada vez más disfrutamos de los placeres materiales, y sin embargo el vacío dentro de nuestros espíritus aumenta día a día. Nadie entiende por qué es así, pero las palabras de Dios revelan la raíz del dolor y el vacío de la humanidad. Leamos un pasaje de las palabras de Dios: ‘El mundo dentro de este, sin lugar para Dios, es oscuro, vacío sin esperanza. […] Y es que sin la dirección de Dios, por mucho que los gobernantes y sociólogos se devanen los sesos para preservar la civilización humana, todo es inútil. Nadie puede llenar el vacío en el corazón del hombre, porque nadie puede ser su vida, y ninguna teoría social puede liberarlo del vacío que lo aflige. Ciencia, conocimiento, libertad, democracia, ocio, comodidad, todas estas cosas no son sino un consuelo temporal. Incluso teniendo esto, el hombre pecará inevitablemente y se quejará de las injusticias de la sociedad. Estas cosas no pueden aliviar el anhelo y el deseo del hombre por explorar. Porque la humanidad fue creada por Dios, y sus sacrificios y sus exploraciones sin sentido sólo pueden llevarla a una angustia mayor. El hombre existirá en un estado constante de miedo, no sabrá cómo afrontar el futuro de la humanidad ni cómo hacer frente a la senda que tiene por delante. El hombre incluso llegará a temer a la ciencia y al conocimiento, y más aún al sentimiento de vacío dentro de sí. […] Después de todo, el hombre es hombre. Ninguno de ellos puede reemplazar la posición y la vida de Dios. La humanidad no sólo requiere una sociedad justa en la que todos estén bien alimentados, y que sea igualitaria y libre, sino la salvación de Dios y Su provisión de vida para ella. Sólo cuando el hombre recibe la salvación de Dios y Su provisión de vida para él pueden resolverse las necesidades, el anhelo de explorar y el vacío espiritual’”.

Después de leer las palabras de Dios, la hermana continuó diciendo: “Las palabras de Dios han explicado a fondo la raíz de nuestro vacío y dolor. Después que fuimos corrompidos por Satanás, comenzamos a evitar a Dios, y perdimos la guía y el suministro de las palabras de Dios y vivimos bajo el poder de Satanás, y es por eso que la humanidad vive vidas tan vacías y dolorosas. En nuestras vidas, todos luchamos y corremos por el dinero, la fama, la fortuna y los placeres físicos, y cuanto más perseguimos estas cosas, más insatisfechos y codiciosos nos volvemos. Cuando obtenemos estas cosas, nuestro estándar material de vida mejora y nuestra carne obtiene disfrute, pero después de haberlas disfrutado, nuestros corazones se sienten vacíos una vez más. Cuando no podemos obtener estas cosas, nos sentimos aún más doloridos e indefensos. Por lo tanto, las personas que no tienen dinero o estatus se sienten vacías y no tienen un impulso en la vida, y así es exactamente como los que sí tienen dinero y estatus y gran disfrute en la vida se sienten también vacíos y sin ningún impulso. Algunas personas han intentado muchas maneras de llenar el vacío en sus espíritus; van a clubes de baile, fuman y beben, van de compras, viajan, y algunas personas incluso prueban drogas. Pero no importa lo que hagamos, todo es en vano. Esto demuestra que el dinero, la fama, la fortuna y los placeres físicos no pueden resolver el vacío de la humanidad, ni pueden hacernos felices y gozosos. Nosotros, la humanidad, fuimos creados por Dios, y solo acudiendo ante Dios, aceptando Su salvación y viviendo por Su palabra pueden nuestros corazones sentirse a gusto y en paz, y podemos librarnos de este vacío”.

Después de escuchar las enseñanzas de la hermana, pensé de nuevo en las palabras de Dios, y sentí como si Sus palabras hubieran hablado directamente a mi corazón. Aunque no me preocupaba por poder comprar comida o ropa en ese momento, aun así no era feliz en la vida. A fin de pasar el tiempo y librarme de mi vacío, salía a menudo con mis amigos a comer, beber y divertirnos. En esos momentos, me sentía físicamente satisfecho y parecía, a primera vista, ser muy feliz. Pero cuando llegaba a casa, especialmente cuando estaba completamente solo, me sentía increíblemente vacío e indefenso, tanto así que me sentía como si no tuviera metas en la vida, y que la vida misma no tenía sentido. Mi vida de gastos fastuosos, libertinaje y de beber sin ninguna inhibición, me había traído solo felicidad temporal, pero nunca había sentido la verdadera felicidad. Tal vez creer en Dios realmente era la única manera en que podía resolver mi vacío espiritual.

Tengo la esperanza de librarme del vacío

La hermana puso entonces el video de un himno llamado “Si Dios no me hubiera salvado”. Este himno me hizo sentir como si yo mismo hubiera experimentado las palabras y, mientras cantaba, cada escena de mi vida pasaba por mi mente como si fuera una película. Mi vida anterior había sido la de beber sin inhibiciones, sin saber de dónde venía la humanidad ni cómo debíamos vivir, sin metas en la vida y sin nada qué esperar, sino más bien deambulando sin rumbo a lo largo de todo el día, como dice el himno: “caminando con dolor en el pecado, sin esperanza cada día y desolado”. Además, vi que, después de que los hermanos y hermanas en el video comenzaron a creer en Dios, vivieron vidas libres y liberadas. Encontré esto profundamente conmovedor para mi corazón y, en ese momento, sentí que Dios era verdaderamente capaz de salvarnos de nuestras vidas vacías y dolorosas, y quise seguir estudiando la obra de Dios.

Posteriormente, a través de la lectura de las palabras de Dios y del encuentro y la comunicación con hermanos y hermanas, llegué a entender aspectos de la verdad como la fuente de la degeneración de la humanidad, cómo Satanás corrompe al hombre, cómo Dios salva al hombre, y cómo vivir una genuina semejanza humana. Vi que las palabras expresadas por Dios Todopoderoso no podían haber sido pronunciadas por ningún ser humano, y Sus palabras me mostraron la dirección a seguir en la vida y me enseñaron lo que yo debía seguir para vivir una vida llena de sentido, fueron de gran ayuda para mí. Más tarde me uní a la iglesia y a menudo asistí a reuniones y compartí las palabras de Dios con mis hermanos y hermanas. Me sentí muy enriquecida al vivir de esta manera, y mi espíritu experimentó una paz y una alegría que nunca antes había sentido.

La causa principal de mi incapacidad para resistir la tentación

Un día, cuando terminé de trabajar, mis compañeros me pidieron que saliera con ellos. Pensé que no había estado comiendo y bebiendo con ellos durante mucho tiempo, que mi vida se había vuelto un poco insípida, y pensé que sería genial salir con ellos y buscar alguna distracción por un tiempo. Y entonces salí con ellos. Después de llegar a casa esa noche, tranquilicé mi corazón y reflexioné: “Ahora creo en Dios, ¿pero le agrada a Dios vivir una vida tan libertinaje como la de los incrédulos? Así no es como debe actuar un cristiano”. Entonces acudí ante Dios para orar: “¡Oh, Dios! Ya no quiero caer en la degeneración, pero no puedo librarme de la tentación. Por favor, ayúdame a superar estos deseos y tentaciones físicas”. Más tarde, leí las palabras de Dios: “Nacido en una tierra tan sucia, el hombre ha sido gravemente asolado por la sociedad, ha sido influenciado por una ética feudal, y ha sido enseñado en ‘centros de educación superior’. Un pensamiento retrógrado, una moral corrupta, una mala visión de la vida, una filosofía despreciable, una existencia completamente inútil, y un estilo de vida y costumbres depravados, todas estas cosas han penetrado fuertemente dentro del corazón del hombre, y han socavado y atacado severamente su conciencia. Como resultado, el hombre está cada vez más distante de Dios, y es cada vez más contrario a Él. El carácter del hombre se vuelve cada vez más vicioso día tras día, y no hay una sola persona que voluntariamente renuncie a algo por Dios, ni una sola persona que voluntariamente obedezca a Dios, ni menos aún, una sola persona que busque voluntariamente la aparición de Dios. En vez de ello, bajo el campo de acción de Satanás, el hombre no hace más que buscar el placer, entregándose a la corrupción de la carne en la tierra del lodo. Incluso cuando escuchan la verdad, aquellos que viven en la oscuridad no consideran ponerla en práctica, ni tampoco muestran interés en buscar a Dios, aun cuando hayan contemplado Su aparición. ¿Cómo podría una humanidad tan depravada tener alguna posibilidad de salvación? ¿Cómo podría una humanidad tan decadente vivir dentro de la luz?

A partir de las palabras de Dios, llegué a comprender por qué era capaz de creer en Dios y era incapaz sin embargo de soportar la tentación de mis compañeros de trabajo, y por qué mi corazón seguía disfrutando de llevar una vida tan derrochadora con ellos: era debido a los efectos causados por las tendencias malvadas de la sociedad. Todo tipo de dichos populares en la sociedad, como los axiomas erróneos de la vida “Aprovecha el momento, pues la vida es breve.” Y “La vida es breve. Goza la copa y el canto mientras puedas.” se habían arraigado en mi corazón. Creía que la gente debía perseguir los placeres físicos en la vida y concentrarse en comer, beber y ser feliz, y pensaba que solo ese tipo de vida podía traer felicidad a la gente y elevarla por encima del mundo rutinario, y que entonces toda la vida de uno no sería en vano. Sin estas cosas, la vida parecía totalmente sin sentido, así que si no salía a comer, beber y divertirme por un tiempo, mi corazón empezaba a anhelarlo. Debido a que estaba sin la verdad y no sabía lo que era positivo y lo que era negativo, me había visto envuelto en estas tendencias malvadas, disfrutando de placeres pecaminosos y llevando una vida desinhibida de bebida, degeneración y decadencia. Aunque mi carne obtuvo un goce temporal, mi espíritu permaneció vacío y dolorido, sin los objetivos correctos que perseguir en la vida y sin ser consciente del significado de la vida. A través de las revelaciones de las palabras de Dios, finalmente entendí que estos axiomas de vida pertenecían a Satanás, y que vivir mi vida de acuerdo con estas ideas y puntos de vista solo podía hacerme perder mi dirección. Si yo viviera de esa manera, consideraría que codiciar los placeres del pecado sería algo positivo, perseguiría ciegamente los placeres físicos, me degradaría más y más y no tendría el corazón para perseguir la verdad o seguir el camino correcto en la vida y, finalmente, terminaría siendo lastimado y devorado por Satanás. Gracias a Dios por permitirme ver la verdad del asunto.

Encuentro mi dirección en la vida

Leí otro pasaje de las palabras de Dios: “Cuando investigas repetidamente y analizas cuidadosamente los diversos objetivos de la vida que las personas persiguen y sus diversas formas diferentes de vida, verás que ninguno de ellos encaja con el propósito original del Creador cuando creó a la humanidad. Todos ellos apartan a las personas de Su soberanía y Su cuidado; son todos pozos en los que la humanidad cae, y que la llevan al infierno. Después de que reconozcas esto, tu tarea es dejar de lado tu antigua visión de la vida, mantenerte alejado de diversas trampas, dejar a Dios que se haga cargo de tu vida y haga arreglos para ti, intentar someterte solamente a las orquestaciones y la dirección de Dios, no tener elección y convertirte en una persona que lo adora a Él”. Las palabras de Dios me mostraron la dirección a seguir en la vida. Como ya entendía que perseguir los placeres físicos era el camino de la degeneración, sabía que debía abandonarlo, elegir seguir a Dios y recorrer el camino de perseguir la verdad y adorar a Dios. Entonces tomé la resolución de buscar diligentemente la verdad, apartarme de las tendencias malvadas de la sociedad y nunca más vivir una vida tan derrochadora como la que tenía antes.

Después de un tiempo, el Festival de Otoño estuvo a la vuelta de la esquina, y mis amigos y parientes me llamaron y me pidieron que saliera con ellos. Anteriormente, yo habría aprovechado la oportunidad de salir a comer, beber y divertirme con amigos y familiares en una festividad como esa, e iría por todas partes para complacerme, creyendo que eso me haría muy feliz. Ahora, sin embargo, había llegado a darme cuenta de que solo buscando la verdad, podía obtener una sensación de paz y seguridad. Si saliera con ellos, solo obtendría un goce físico temporal y esto haría que mi corazón rehuyera a Dios, y aun así me sentiría vacío después. Así que, cortésmente me negué y luego fui a la iglesia a leer las palabras de Dios y a compartir la verdad con mis hermanos y hermanas, y sentí una sensación de felicidad y seguridad que nunca antes había sentido.

 

Pensé que anteriormente había escogido un camino equivocado, me había enredado en las tendencias malvadas de la sociedad, había codiciado los placeres del pecado, me había degradado más y más y había perdido toda apariencia de ser humano, todo ello por el bien de llenar mi vacío. Fue la misericordia de Dios la que me trajo de regreso a Su familia. Solo después de haber aceptado las verdades expresadas por Dios, llegué a tener un cierto discernimiento de estas tendencias sociales malvadas y de los axiomas de la vida de Satanás, llegué a saber lo que era la verdadera felicidad y lo que era más valioso de perseguir en nuestras vidas, y encontré la verdadera dirección en la vida. Le ofrezco a Dios mi más sincero agradecimiento.

Fuente: Caminando con Jesucristo

Escribir comentario

Comentarios: 0