¿Por qué a menudo pecamos y no ponemos en práctica las enseñanzas del Señor?

Prédica cristiana | ¿Por qué a menudo pecamos y no ponemos en práctica las enseñanzas del Señor?

Recientemente hemos recibido muchos mensajes privados de amigos. La hermana María de México dijo: “A menudo miento y engaño para proteger propios intereses, siendo incapaz de practicar las enseñanzas del Señor. ¿Podrían hablar conmigo sobre cómo dejar de cometer pecados?”.

El hermano José dijo: “El Señor nos demanda que seamos tolerantes y pacientes, pero yo no puedo evitar perder los estribos ante mi familia en la vida, y siempre puedo no puede actuar según Sus palabras…”. 

El hermano Jario dijo: “A menudo tengo celos de mis compañeros de trabajo que son mejores que yo y no puedo llevarme bien con los demás, sé que esto no es agradable al Señor pero soy incapaz de actuar según Sus palabras. ¿Qué debo hacer…?”.

Cuando uno vive en pecado con frecuencia, aunque ora y se arrepiente llorando ante el Señor, aún no puede liberarse de él. Muchos hermanos y hermanas están angustiados por esto. ¿Por qué entonces pecamos a menudo y no podemos escapar de la esclavitud del pecado?

Dios dice: “Aunque Jesús hizo mucha obra entre los hombres, sólo completó la redención de toda la humanidad, se convirtió en la ofrenda por el pecado del hombre; no lo libró de su carácter corrupto. Salvar al hombre totalmente de la influencia de Satanás no sólo requirió que Jesús se convirtiera en la ofrenda por el pecado y cargara con los pecados del hombre, sino también que Dios realizara una obra incluso mayor para librar completamente al hombre de su carácter corrompido por Satanás. Y así, ahora que el hombre ha sido perdonado de sus pecados, Dios volvió a la carne para guiar al hombre a la nueva era, y comenzó la obra de castigo y juicio. Esta obra llevó al hombre a una esfera más elevada. Todos los que se someten bajo Su dominio disfrutarán una verdad más elevada y recibirán mayores bendiciones. Vivirán realmente en la luz, y obtendrán la verdad, el camino y la vida”.

De las palabras de Dios podemos ver que lo que hizo el Señor Jesús fue la obra de redención, y sólo perdonó los pecados de la gente. Pero la naturaleza pecaminosa aún está profundamente arraigada en nuestro interior. Así que el Señor ha venido a hacer una etapa de obra de juicio y purificación y a otorgar más verdad a las personas, con el fin de resolver su naturaleza pecaminosa, para que se despojen de la esclavitud del pecado y se conviertan en hombres que obedecen y revenrencian a Dios, sólo entonces estarán calificadas para entrar en el reino de Dios.

Compartiendo la verdadera experiencia de la hermana Ana con todos. La hermana Ana solía estar angustiada por pecar frecuentemente, porque no era tolerante con su familia y amigos en su vida y no podía evitar enfadarse cuando los demás hacían algo que no concordaba con sus pensamientos, y a pesar de que oró constantemente para confesar ante el Señor, no cambió nada. Pero después de que aceptó la obra de Dios de los últimos días, comprendió la raíz de cometer pecados con frecuencia a partir de la Palabra de Dios y encontró la manera de deshacerse de ellos, y a través de experimentar el juicio de la Palabra de Dios, entendió algunas verdades y se dio cuenta de la verdad de que había sido corrompida por Satanás, y sabía orar a Dios en los asuntos que le hacían perder los estribos. Ahora, al leer la Palabra de Dios y ponerla en práctica, ha cambiado un poco su carácter arrogante y no se angustia a menudo por sus pecados como antes.

Después de leer la experiencia de la hermana, ¿tiene usted curiosidad por saber cómo Dios lleva a cabo la obra de juicio para purificar a la gente en los últimos días? ¿También quiere que su naturaleza corrupta cambie gradualmente como ella? Entonces, no se pierda el siguiente Película cristiana “He encontrado el camino para purificarme del pecado”, le ayudará a encontrar formas prácticas.

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